La IA en el Arte
La Inteligencia Artificial se ha colado en nuestras vidas de manera vertiginosa en el último par de años, aunque sus bases se hunden décadas atrás. En las actividades tecnológicas o científicas parece muy evidente y más intuitivo su uso, pero una actividad tan asociada al pensamiento humano como es el arte, no ha sido una excepción en este tsunami IA que vivimos.
Desde la literatura hasta las artes plásticas y pasando por el cine ( entre otras manifestaciones ), la IA y los LLMs están transformando la manera en que concebimos y creamos arte. En el artículo de esta semana en el blog de OpenExpo Europe, analizaremos someramente cómo la IA está consolidándose en estos campos. Hablaremos de su evolución, su estado actual y como podemos concebir su futuro más inmediato. Lógicamente tampoco podemos olvidar las controversias y problemas legales que emergen con esta tecnología.
Serán apuntes sobre temas que desarrollaremos con mayor calado en próximas entradas del blog.
IA en la Literatura
Los LLMs y la GenAI han hecho de la producción de texto su primer y más visible baluarte. Sin embargo existen constancias de experimentos con primitivos algoritmos generativos desde 1984 que dieron lugar a que Racter, un programa de IA( la de aquellos años), escribiera “The Policeman’s Beard is Half Constructed”, un volumen de poesía surrealista. Aunque, lógicamente, muy limitado por la tecnología de la época, podríamos considerar que este fue uno de los primeros intentos de crear literatura generada por una IA.
Hoy en día, los modelos de lenguaje como GPT de OpenAI han llevado la generación de texto a otro nivel. Lógicamente está siendo profusamente usada en la generación de texto en diferentes campos, pero desde GPT-3 (sobre todo ), este modelo puede escribir poesía, cuentos y hasta novelas, imitando estilos de diversos autores con sorprendente coherencia.
Desde la aparición de estos modelos LLM podríamos citar numerosos hitos de una novela completamente escrita por IA, en la que los críticos perciben un narrativas fluidas y una, impensable, hasta ahora,complejidad temática. El futuro de la IA en la literatura parece prometedor, aunque también tiene su reverso oscuro que apuntaremos al final de este artículo.
Con la mejora continua de los grandes modelos de lenguaje, en todas sus variantes, podríamos ver obras de mayor profundidad y creatividad, incluso, y quizás este sea el futuro más ideal, colaboraciones entre humanos y máquinas donde la IA actúe como coautor, sugiriendo tramas y desarrollos que luego corrijan, amplíen o desarrollen autores humanos con su toque personal.
IA en las Artes Plásticas
Es evidente que, aunque la literatura fue de las primeras “afectadas” por la GenAI, las artes plásticas están siendo igualmente campo de actuación para estos modelos. El llamado “arte generativo” comenzó a ganar tracción con artistas como Harold Cohen, quien creó AARON,tan pronto como en los años 70, una IA que podía dibujar y pintar. Pero este no era más que un rudimentario principio, pues el auge del aprendizaje profundo llevó a la IA en las artes plásticas a insospechadas dimensiones.
De este modo, en el boom de los últimos años y por citar sólo un ejemplo, artistas como Mario Klingemann utilizan redes neuronales para crear obras que quieren ir más allá de la percepción tradicional del arte y que se exhiben en los modernos templos del arte, v.gr. : el MOMA de Nueva York.
En 2018, el colectivo Obvious vendió en Christie’s, por primera vez una obra de arte generada por IA, Edmond de Belamy, Su precio en la subasta alcanzó los 432.500 dólares, lo que ofreció una nueva visión del potencial comercial y artístico de esta tecnología.
La IA se está convirtiendo en una herramienta esencial para algunos artistas, que pretenden la creación de obras complejas y multidimensionales que serían imposibles de realizar con los usos tradicionales.
IA en el Cine
En el mundo del cine, se han explorado los caminos de la IA desde sus primeros días, pero el uso de IA en la creación de películas es más reciente y hay que asociarlo, indefectiblemente, a las recientes capacidades de la generación de vídeo desde texto.
Sin embargo, ya en 2016, IBM Watson fue utilizado para crear el tráiler de la película Morgan. En este caso, que no fue generativo, la IA analizó cientos de tráilers y fue seleccionando las escenas que podían maximizar el impacto emocional.
Hoy por hoy, la IA está involucrada en múltiples etapas de la producción cinematográfica. Por poner un ejemplo, el cortometraje “Zone Out “ fue escrito parcialmente por una IA, y en nuestro artículo, en este mismo blog de OpenExpo Europe, hemos analizado recientemente la últimas tendencias en vídeo generado por inteligencia artificial, lo que ha abierto un enorme campo a las futuras producciones hechas en su totalidad o, al menos, asistidas por estos modelos generativos.
Uno de los más recientes campos exploratorios de las productoras de séptimo arte son las experiencias cinematográficas interactivas personalizadas. La IA podría transformar no solo cómo se hacen las películas, sino también cómo las consumimos y a ello estaremos atento desde nuestras entradas, para contártelo.
Problemas y controversias no faltan.
Con la creciente integración de la IA en el arte, al igual que en los demás campos donde se aplica, surgen importantes cuestiones legales y éticas. Una de las principales controversias (para algunos la fundamental) gira en torno a los derechos de autor: ¿quién posee los derechos de una obra creada por una IA? Actualmente, las leyes de derechos de autor varían e incluso disienten mucho entre si, y muchas no reconocen a las IAs como autoras legítimas, dejando a los creadores humanos o propietarios de los modelos como titulares de los mencionados derechos.
Además, existe también un debate abierto sobre si la Inteligencia Artificial potencia o merma la creatividad humana. Los defensores ofrecen como argumento que la IA puede liberar a los artistas de tareas repetitivas, permitiéndoles centrarse en aspectos más creativos. De otro lado están los críticos que argumentan el temor a que la dependencia excesiva de la GenAI pueda llevar a una homogeneización del arte y a la pérdida de la autenticidad y originalidad humanas.
No cabe la menor duda de que la Inteligencia Artificial está revolucionando nuestras vidas, y dentro de ellas, el arte en todas sus formas, ofreciendo nuevas herramientas y posibilidades creativas. Sin embargo, ello no está exento de problemas legales y éticos. El potencial de la IA para transformar el arte es muy tentador y la clave estará en encontrar un equilibrio que permita a la tecnología y a la creatividad humana coexistir y enriquecerse mutuamente. A ello permaneceremos atentos en sucesivos artículos en este blog de OpenExpo Europe.