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Nov

Fragmentar en entornos cloud: Cloud Management Platform

Fragmentar en entornos cloud: Cloud Management Platform

¡Hola! y bienvenidos al segundo artículo de una serie de cuatro sobre la fragmentación en entornos Cloud, DevOps y DevSecOps.

En el primer artículo realizamos una primera introducción del concepto de fragmentación.

En esta ocasión vamos a hablar de la fragmentación de entornos Cloud.

Fragmentación en entornos cloud

En el caso de Cloud la situación no se limita a los proveedores de Cloud público, el concepto del Cloud en si es fragmentado, ya que, desde sus comienzos, existe un reto en la convivencia entre los diversos fabricantes y los entornos privados o más tradicionales que siguen siendo una parte importante dentro de las organizaciones; pero, sobre todo, por sus propios beneficios como portabilidad, globalidad, escalabilidad, etc. Que no hacen al Cloud, en su propia naturaleza, en algo estático o delimitado; a todo eso hay que sumarle la gran variedad de piezas que están surgiendo para solucionar problemas o cubrir necesidades específicas derivadas de entornos modernos. Por ejemplo:

  • Gestión federada de múltiples clústers de Kubernetes.

  • Versionado de la infraestructura.

  • Procesos automatizados de despliegue.

  • Análisis de vulnerabilidades.

  • Monitorización de entornos.

  • Gestión y monitorización de costes.

  • Un largo etcétera.

En definitiva, partimos de un entorno de naturaleza heterogénea al cual hemos ido sumando durante años una serie de piezas que solucionan problemas concretos pero que han multiplicado la complejidad de nuestros ecosistemas.

Pero la dificultad cuando se habla de Cloud no es puramente técnica, también lo es de gestión, financiera e incluso de seguridad.

En un artículo que he escrito hace no mucho, hablaba de como dotar a las organizaciones de una capacidad Omnicloud (poder operar donde quieran, cuando quieran) mediante ontologías y una estandarización OpenSource; ahora bien, a nivel de tecnología y entornos empresariales complejos, lo que se necesita para combatir la fragmentación del Cloud, además de ese análisis de los equipos, es pegamento, es un orquestador, es un CMP (Cloud Management Platform). Los CMP no son nuevos. Es un concepto que existe desde hace años, pero como todo en este mundo tecnológico, han tenido que mejorar y evolucionar de forma constante durante todo este tiempo. Un CMP, utilizado de forma efectiva, actúa como una capa de unificación y estandarización en la cual podemos operar de una única forma para diversas tecnologías y entornos.

Características de un Cloud Management Platform (CMP)

Hay una gran variedad de CMP en el mercado e incluso muchas organizaciones optan por crear el suyo propio y, por norma general, todos tienen las siguientes características:

Visibilidad

Una de las primeras cosas que debemos tener en cuenta es la monitorización, obtener visibilidad de lo que está pasando y sobre todo cuanto nos cuesta que eso pase. Necesitamos que una Cloud Management Plataform sea capaz de extraer e interpretar información de nuestros entornos Cloud para responder a cuestiones como:

  • ¿Qué ha fallado?

  • ¿Es posible que algo falle próximamente?

  • ¿Cuál es el impacto de un posible fallo?

  • ¿Qué coste tiene nuestro entorno de desarrollo?

  • ¿Se ha superado el presupuesto de un departamento?

  • ¿Estamos cumpliendo nuestro compromiso de uso de un proveedor específico?

Una visión unificada a la vez que detallada es importante para conocer el comportamiento de nuestra infraestructura, servicios y aplicaciones, por separado y en su conjunto, evitando tener distintos puntos de control, distintos paneles donde ver información disgregada.

Accesibilidad

Otro pilar es la accesibilidad, desde un único punto a toda la oferta de servicios Cloud; una puerta de entrada a todo el marco definido y que, sumado a los portales de auto aprovisionamiento, otorgue autonomía y capacidad de decisión a los diversos equipos de una organización siempre dentro de un marco de tecnologías y arquitecturas de referencia.

Esta puerta de entrada nos permite disfrutar de servicios y arquitecturas de referencia, de distintos entornos Cloud, ofreciendo ventajas tanto a equipos que consumen esos servicios y arquitecturas como a aquellos que las definen, operan y mantienen.

Estandarización

Un CMP tiene como una de sus misiones principales la estandarización de entornos entre las diferentes opciones Cloud que se haya seleccionado, facilitando así la optimización de la gestión técnica de los mismos frente a actualizaciones, modificaciones, parcheos, despliegues, etc. Pero también a nivel de seguridad, ya que con los despliegues rápidos y masivos que se están llevando a cabo en los entornos Cloud la superficie de ataque a nuestras a organizaciones crece, si estandarizamos y homogeneizamos esa superficie, tendremos mucho más control sobre aspectos de seguridad.

Gestión

Ya hemos hablado de la gestión técnica de entornos Cloud o también llamada explotación, pero que pasa con la gestión financiera?

Tener una gestión dispersa entre distintos proveedores de soluciones Cloud puede ser tan complejo como gestionar diversas organizaciones a la vez, una Cloud Management Platform actúa como intermediario en esta gestión, permitiendo realizarla desde un único punto, para un proveedor o de forma agregada para varios o todos ellos.

Adaptabilidad

He dejado este aspecto para el final del artículo ya que no implica situaciones presentes sino futuras.

Frente a la incorporación de un nuevo proveedor, de una nueva plataforma o un servicio, un CMP aumenta nuestra capacidad de adaptación y reduce la curva de aprendizaje, ya que en muchos aspectos no necesitamos una interacción directa con la nueva pieza mientras la hagamos a partir de la capa que nos otorga el CMP; gestión de costes, arquitecturas de referencia, monitorización, gestión de acceso, etc. Son aspectos con los cuales partimos para la futura inclusión de tecnología si contamos con un buen CMP.

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