El futuro del código abierto: encuesta The New Stack, The Linux Foundation y el Grupo TODO

Seguramente, si no eres un programador o un interesado en el tema, no sepas que la mayoría de las plataformas que utilizas día a día, están empleando, para su funcionamiento, el código abierto.

Reconocidas compañías y sitios web utilizan el código abierto como: Android, que utiliza el conocido sistema Java; Apple, que creó su propio lenguaje con Swift; Facebook, que sigue manteniendo PHP; Instagram con Phyton; e incluso, Whatsapp – sin el que hoy la vida se vería imposible – que utiliza el lenguaje de programación Erlang.

Si los “grandes tecnológicos” han establecido en su sistema este tipo de software, posiblemente podremos ser testigos de que diversas empresas van a hacerlo también.

De acuerdo con una encuesta realizada por The New Stack y The Linux Foundation (a través del Grupo TODO) en 2018, en la que participaron 748 encuestados (la mitad de ellos desarrolladores), el 53% de ellos señalaron que su organización cuenta con un sistema de software de código abierto o que, por lo menos, tiene planes de implementar uno en la misma.

Se trata, por tanto, de datos positivos para el ecosistema FLOSS, sobre todo, sabiendo que, según los realizadores de la encuesta, la comunidad estuvo bastante representada, ya que el 21% de los participantes pertenecían a grandes compañías, mientras que el 42% trabajaban en PYMES. Así mismo, se espera que en el año 2020 se triplique el número de compañías que trabajan con código abierto.

En cuanto a los beneficios que proporciona el uso de código abierto en las empresas, la encuesta señaló tres principales: en primer lugar, el conocimiento del uso y las dependencias del código abierto; en segundo lugar, una mayor velocidad y agilidad del desarrollador que lo usa; y finalmente, una mejora del cumplimento de las licencias.

Con respecto a la opinión de los encuestados sobre estos beneficios, más del 60% consideraron el programa de código abierto como “altamente crítico” para la compañía, teniendo “un impacto significativo en su capacidad para trabajar”. Por tanto, estos sistemas contribuyen a que los desarrolladores sean más productivos.

¿Y los que todavía no utilizan código abierto?

Entre los 77 encuestados que todavía no trabajan con un sistema de código abierto, pero que su empresa está planeando implementar uno, el 70% de ellos respondió que para el próximo año – 2019 – se espera contar con uno ya en funcionamiento. De la misma forma, la mayoría de ellos apuntaron que los principales desafíos para poder establecer un programa de código abierto radican en saber cómo implementar las políticas de código abierto y en “tener la aceptación y el apoyo de los ejecutivos”, además de, “encontrar personal legal con experiencia en código abierto y encontrar los recursos necesarios para cumplir con las licencias”.

Por otro lado, del 47% de los participantes sin planes por establecer un programa de código abierto en sus negocios, el 43% de ellos estaban interesados en hacerlo, pero lo desconocían y aprendió sobre ellos durante la encuesta. En cuanto al resto, el 42% indicaron la falta de tiempo como un factor determinante para no implementarlo y los demás, en su mayoría, por la pequeña magnitud de la empresa y porque no encuentran el valor comercial.

Como conclusión de esta parte de la encuesta, un 70% de los que no cuentan con un programa de código abierto, consideran que con él se obtendría beneficios a pesar de los desafíos que conlleva su establecimiento.

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